¿Cómo un ERP ayuda a la toma de decisiones agiles?
Como definió Forrester, la toma de decisiones es un proceso de transformación de la información en acción.

El proceso de toma de decisiones es fundamental en cualquier empresa. Podríamos decir que el 90% del tiempo que pasamos en una empresa lo hacemos tomando decisiones, de mayor o menor envergadura. Además del tiempo que pasamos en este proceso, su importancia radica en que una buena o mala decisión puede marcar el porvenir de la empresa de forma positiva o negativa, así como su posición respecto a la competencia.

Sin embargo, tomar una buena decisión no es fácil, por lo que se hace necesario contar con un sistema de información eficiente. Para ello es importante contar con datos de calidad, a partir de los cuales podamos elaborar información de valor que permita a las personas mejorar su conocimiento sobre algo con la finalidad de aplicarlo en beneficio de la empresa.

Hay líderes que toman decisiones basándose únicamente en su intuición, sus ideas, etc…,  y aunque en ocasiones esto ha podido dar buenos resultados en un entorno estable en el que hemos vivido durante algunas décadas, en el entorno actual convulso y cambiante ya no son eficaces.

Lo mejor es adoptar un sistema para la toma de decisiones ágiles, orientado a los datos y a los hechos, lo que se ha venido en llamar una orientación analítica al dato. Esto se está volviendo un requerimiento crítico a la hora de desarrollar estrategias realmente competitivas y de éxito.

Por supuesto, un buen  sistemas ERP junto con las aplicaciones BI (inteligencia de negocios) aportan mucho valor a la toma de decisiones, ya que contiene datos valiosos sobre todos los procesos de gestión interna de la empresa. Vamos a ver cuál es su papel.